Imagínala descender por el horizonte mientras refleja su luz en el nocturno atlántico y a la vez se muestra como un espejo en las lagunas que la marea no ha sabido retirar de la arena.
Pasear descalzo por la playa de Los Lances te conecta con la tierra, así de simple y vital, pero hay mucha diferencia entre hacerlo a la hora indicada o no